¡Hola a todos! Ya estoy aquí de nuevo y esta vez me gustaría abrir un debate con quien se interesa por el personal Branding y la marca personal, o simplemente con quien le interesen las personas.
A ver, ¿es posible tener varias marcas personales? Que somos polifacéticos ya se sabe, pero ¿dejamos la misma marca personal en los diferentes ámbitos en los que nos movemos?
Una misma persona, distintos oficios. ¿Distintas marcas personales?
Pongamos por caso un joven arquitecto, que misteriosamente ha conseguido encontrar tiempo para formar un grupo de música con unos cuantos amigos también estudiantes, de ingeniería, médicos… (estudios muy exigentes todos ellos, de ahí lo del misterio).
Se lo pasan tan bien tocando que van haciendo bolos y cada vez les salen más oportunidades. Llenan las salas con su aire desenfadado y entusiasta, un tanto gamberro. Nada que ver con la presentación y defensa de proyectos de arquitectura y urbanismo en una institución gubernamental, y, ni que decir tiene de la seriedad y responsabilidad de quien pasa un MIR.
¿Puede existir un Lucio cantante, que anima a todos a participar, que no para de saltar y reír, y un Lucio calculando la estructura de una nave industrial, asumiendo la responsabilidad de que ésta se aguante en pie?
Seguramente la marca que deje en los asistentes a uno de los conciertos será totalmente diferente a aquella que vaya sembrando en los estudios de ingeniería con los que trabaje. Y lo mismo para el resto de los componentes del grupo.
Es más, ¿se podría desarrollar un personal branding para cada una de las “versiones” de una misma persona? Ahí ya entramos en lo que queremos hacer público. Es cuando ponemos en marcha las herramientas necesarias para que nos conozcan en redes sociales por ejemplo. ¿Podríamos imaginar un perfil linkedin, en el que se enumeraran los conciertos realizados, y al mismo tiempo los proyectos arquitectónicos de David? Bueno, en este caso a lo mejor pensaríamos en la creatividad de la persona plasmada en diferentes sectores. Pero ¿se entendería a un saxofonista traumatólogo? Seguramente, la música quedaría relegada a hobby. Y no sería una decisión del todo errónea visto el panorama profesional de hoy en día.
Sin embargo, las dos pasiones pertenecen a una misma persona. Se dejaría la faceta músico de lado, reservándola a un público privado o íntimo, para hacer sobresalir aquella otra que por norma general o, por “corrección política”, se entienda como socialmente más relevante, con más prestigio. ¿Nos estaríamos perdiendo algo importante de la marca personal de alguien, adoptando esta postura?
En todo caso, quien conociera al músico, tendría una visión de la persona absolutamente distinta que quien tan solo supiera de las competencias en una determinada actividad profesional de la persona en cuestión. La impronta que dejaría en los demás sería muy diferente.
¿Dejamos la misma huella en todos los ámbitos en los que nos movemos? Evidentemente no. Si no, que se lo pregunten a un padre o madre de familia, que lidera su equipo de trabajo sin problema, mientras que en casa se rinde a la tozudez de su hij@ de 5 años, ante la mirada atónita de los “inquilinos” de mayor edad (es decir, los primogénitos de la familia, acostumbrados a otro tipo de abordaje paternal y/o maternal), que no desperdician la oportunidad de mofarse sin ningún decoro del pobre progenitor/a aturdido/a por su poca autoridad.
¿Tenemos varias marcas personales o solo una?
Bromas a parte, pienso que las personas que son capaces de llevar a cabo actividades tan dispares y hacerlo bien en todas ellas, deberían explotar esa versatilidad, que por supuesto, sería el rasgo principal de su marca personal.
Sinceramente, no me importaría que un músico-arquitecto diseñara la casa de mis sueños, o ir a escuchar un concierto de mi digestólogo.
No sé si alguien más estará de acuerdo conmigo, pero estaría bien que enviarais vuestros comentarios y ver si soy la única “dualoferviente” del personal branding.
¡Gracias por leerme y hasta pronto!
Ana dice
Hola Sylvie!
Me ha encantado tu artículo, estoy muy de acuerdo… Es más, me resolviste una duda grande… Cómo personas nos desenvolvemos en diferentes contextos con diferentes roles, y aunque mantegamos nuestra autenticidad y esencia, dejamos huellas diferentes…
Yo también me declaro «dualoferviente».
Gracias por tus reflexiones.
Ana
Sylvie Fernandez dice
Gracias por leerme Ana, me alegra haberte sido útil.
Hasta pronto.
María Isabel dice
Coincido contigo Sylvie, distintas experiencias profesionales, mismo profesional, ¿las puede desempeñar? Si al 100%. Llamarlo marca personal o hobbie, profesionalmente me he considerado siempre así, hay quienes lo «saben ver» y quienes no te consideran lo sufientemente especializada.
Sylvie Fernandez dice
Gracias por leerme María Isabel. Veo que tu marca personal , tu esencia, aquello que te define, es precisamente esa dualidad. Espero que cada vez haya más personas que entiendan que eso es una ventaja para ti y, para ellas, así como para los proyectos en los que participen, si te tienen como colaboradora.
Mireya Trias dice
Menudo debate. ¡ Me apunto ! Pienso que parte de una marca se basa en la percepción que los demás tienen de uno mismo y que esa parte no se puede controlar porque está fuera de ti. En cambio si basas tu marca personal en tus valores, creencias y personalidad, no importa tanto en qué actividad te enfoques más. De esta forma puedes transformaste y reinventarte sin perder tu esencia y tu personalidad. Un buen ejemplo de ello sería el de Josef Ahram, es un broker de bolsa y también deportista, modelo, influencer, padre, empresario. Muestra todas estas pasiones a través de las redes sociales que domina. En fin, la marca personal no es estática, así que es un muy buen tema para mostrar que como humanos, podemos tener distintas pasiones, que no hay que confundir con roles cotidianos. He disfrutado leyendo este post. Gracias por el aporte y el debate.
Sylvie dice
Gracias Mireya, me alegro de que te haya gustado y lo hayas comentado.
La marca personal de cada uno de nosotros se basa realmente en nuestros valores, lo que queremos hacer en este mundo y cómo o a través de qué lo queremos hacer. Esta claro, que eso es el fundamento. El desarrollo de nuestra marca (branding) tiene por objetivo poder divulgarla en coherencia con lo que «es» en esencia y, conseguir, en la medida de lo posible, la visión que los demás tienen de uno y de lo que puede aportar a los demás. En los casos como el de tu ejemplo, desde mi punto de vista, es el aspecto » poliédrico» de Las aportaciones a los demás de Joseph Ahram entre otros, lo que encuentro extraordinario y aplaudo. Hasta pronto!
Juan Carlos Giraldo dice
Interesante articulo. Primera vez que te leo. Sylvie
En lo personal, creo que eso de la «huella» que se deja , es con quien interaccionas en cada actividad profesional o personal.
Yo soy podcaster y tengo mi estrategia para mis podcast …quien lo hace YO, por lo tanto estoy desarrollando a través de mis podcast mi marca personal como consultor de marketing y podcaster, siempre ligado a mi carrera de toda la vida : Marketing.
Practico Yoga, y dentro de mi circulo de yoginis, soy considerado con un buen yogini…quien hace el Yoga y quien deja una buena impresión soy YO.
Tengo dos audiencias, una en Inglés – TAN IMPORTANTE en la actualidad el hablarlo – en la Marca Personal/Personal Branding, que nadie, nadie nunca lo toca, o uno por que no lo hablan seguramente, por consiguiente no les conviene «hablar» de eso, en fin, mi marca personal se ve como un consultor bilingue. Cuando aqui en Boston o USA, mis compañeros necesitan ayuda en Español, inmediatamente piensan en mi, por que ? por que quizá dejé esa huella o marca del consultor bilingue.
Tengo un hobbie que comparto con mis circulos, y la impresión que tienen de mi, es que los trabajos que hago son buenos trabajos en madera y pintura, por lo tanto estoy desarrollando una marca personal ligada a esto tambien.
Ahora un punto es reiventarse, y otro es adicionar, esa es la palabra correcta adicionar, por ejemplo, adicioneé a mi vida el Yoga, Ciclismo y Hobbies años atrás, NO perdiendo la escencia de marketer que TODA mi vida trabajé.
Eso de reiventarse también es relativo o quizaá mal entendido, yo le llamo a aquella persona que hoy es abogado y mañana es especialista en marketing en social media, eso no es reiventarse, eso es improvisación o «trabajo por necesidad»o intrusismo
Lo más importante es ser tu mismo y mostrar tus cualidades personales y profesionales, por ejemplo si visitas un twitter de algun «reinventado en Redes» vez que todo es acerca de «su nueva profesión», por que si este muestra su «lado humano» deja de ser «profesional» y su «marca personal» se verá afectada…entonces lo que vez en redes es una maquina automatizada…
En fin saludandote desde mi linda ciudad : Boston, USA
Sylvie dice
Gracias por comentar Juan Carlos! Si está claro que uno va dejando huellas distintas según el ámbito en el que se mueve. Y esas diferentes facetas de uno mismo, creo que añade valor a la persona, como tal y también como profesional. Sobre todo porque en las diferentes actividades, se desarrollan diferentes competencias y éstas pueden extrapolarse a otros ámbitos. Otra cosa es auto proclamarse » experto en xxx» cuando no haces más que asomarte a una profesión. La humildad no es un valor muy apreciado en ciertos círculos a lo mejor, no lo sé. Creo que se puede aprender de todo y de todos y con tiempo y esfuerzo reinventarse o adicionar, preservando lo que te define como persona.
Gracias desde el litoral mediterraneo español!!
Ylse Roa dice
Felicitaciones Sylvie, has escrito un artículo que toca aspectos muy importantes en la vida de cualquier ser humano. En efecto, la marca personal se basa en nuestros valores, pues ella refleja quienes somos y el impacto que dejamos en nuestro entorno por lo que somos y hacemos. La gestión que hagamos de la misma permitirá darle direccionamiento a lo que deseamos proyectar. Y como personas que estamos en constante evolución, poseemos marcas personales que están en crecimiento y desarrollo. No son estáticas, como bien dice Mireya. Las distintas facetas de nuestra personalidad, nuestros talentos, competencias, enriquecen nuestra marca. Y coincido con Juan Carlos en que lo más importante es ser nosotros mismos y mostrar nuestras cualidades. Ser auténticos y humildes. Todos tenemos rasgos artísticos, espirituales, que nos dotan de elementos para ser mejores personas y profesionales. Sólo nosotros podemos escoger qué huellas queremos dejar en función de nuestros objetivos y etapas de nuestras vidas y aplicar las estrategias que nos lleven a ellos.
Gracias Sylvie y Enrique, por abrir esta ventana.
¡Reciban un gran abrazo, desde Caracas!